Esperé hasta que ví el sol. No sé porqué no vine. Te dejé cerca de Ia casa de juegos. No sé porqué no vine. No sé porqué no vine. Cuando ví el amanecer tuve deseos de poder irme volando, en lugar de estar arrodillada en la arena atrapando mis lágrimas con la mano. Mi corazón está empapado en vino tú estarás en mi mente para siempre. A lo largo del mar infinito moriría en éxtasis pero seré un vagabundo conduciendo por el camino, solo. Algo debe hacerte correr no sé porqué no vine. Me siento tan vacía como un tambor...